Esta nueva estación que hemos estrenado hace poco, nos enriquece nuestros platos con alimentos muy sabrosos y nutritivos. Hay que aprovechar de ello.
Os recomiendo sobre todo que no os falte la granada en casa. La puedes utilizar en un montón de recetas o simplemente como postre, sola con trocitos de naranja o bien con un buen requesón.
Cada cucharada de esta fruta te aportará unos buenos antioxidantes, vitamina C (ayuda en las defensas y mantener los cartílagos y el colágeno en orden), vitamina A (magnífica para la vista y para reparar tejidos y mucosas), y fibra .
Eliminar al máximo la piel blanca que recubre los granos de la granada, ya que tiene una toxicidad y sabor no recomendable. La naturaleza es muy sabia y pone impedimentos a los insectos y pájaros para que no lleguen a su interior.
Si está siguiendo una dieta de adelgazamiento, esta fruta te será muy útil por su gran contenido en agua y moderada en kilocalorías. A pesar de tener fibra, también contiene una sustancia en abundancia, los taninos, que la hace más adecuada con personas que padecen diarrea o estreñimiento. Si es este último tu caso, mejor consumirla moderadamente.
Magnífica fuente de potasio y otros minerales que nos irá muy bien tanto por el sistema nervioso, y muscular. Reduce los niveles de colesterol, cuidar el corazón y controlar la hipertensión.
Disfruta de esta fruta, de su color y sabor. Para desgranar con facilidad, la cortas por la mitad y con una mano de mortero dale golpes en la piel. En nada la tendrás lista.
Espero os guste!
Gemma Ribell
Técnica superior en dietética