Cuando escucho esta frase y veo los tipos de dietas exprés que se ofrecen para llegar al verano con unos kg de menos, de verdad que me estremezco. Objetivo: intentar estar magníficos con ropa ligera, hacer desaparecer de golpe las consecuencias de no haberte cuidado todo el año para estar saludable y en forma.
Ahora llegan las prisas, los suplementos dietéticos que nos aseguran una bajada de peso en un santiamén, y los gimnasios a parar esperando un milagro de la naturaleza en cuatro días, para luego volver a recaer en el mismo.
Ahora llegan las prisas, los suplementos dietéticos que nos aseguran una bajada de peso en un santiamén, y los gimnasios a parar esperando un milagro de la naturaleza en cuatro días, para luego volver a recaer en el mismo.
Si haces un régimen drástico es posible que pierdas líquido y músculo, y no sólo grasa. Te encontrarás débil e irritable. Entiendo que el buen tiempo buena cara y buen cuerpo (saludable), pero ¿y el resto del año ?.
En poco tiempo no se pueden adquirir buenos hábitos. Ahora bien, si quieres empezar a cuidarte en esta época porque tienes una motivación extra, haz que te dure para siempre. El año que viene no tendrás que volver con el mismo. Primero no te pongas un objetivo a corto plazo, sé realista y no caigas en dietas milagro que en poco tiempo te harán volver al punto de partida.
Si te apuntas al gimnasio, continúa aunque venga el otoño o el invierno, y alterna ejercicios tantos aeróbicos como tonificantes. Estos últimos aumentan la actividad metabólica y la quema de calorías cuando estamos en reposo.
Ponerse en forma, a veces no significa perder peso necesariamente. Nos interesa sobre todo reducir grasa corporal que es lo que nos puede dar problemas de salud. El gimnasio nos puede ayudar a esto, pero también ganar en masa muscular que de hecho es lo que interesa siempre que sea moderada y adecuada a cada persona. En la báscula puede que no lo notas, pero en cuanto a salud sí.
Combina con una dieta saludable y moderada. Actualmente se come demasiado de todo y más de lo necesario.
Intentar hacer un sprint para llegar al verano divinos y luego hartarse de frituras, cervezas y helados no es lo que le va mejor a tu salud. No es necesario restringir, hay que moderar y no dejar la actividad física en las vacaciones. Camina activamente por la playa o la montaña, haz bici, baila todo lo que puedas y sobre todo disfruta de este magnífico tiempo de desconexión laboral.
Aliméntate de las frutas y verduras que nos regala esta estación. Una ración de paella siempre se digiere mejor con una buena ensalada.
Hasta la próxima!
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Gemma Ribell
Dietista
Dietista